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¿Por qué algunas personas comen y no engordan?

Todo tiene una explicación

Todo tiene una explicación

¿A dónde se va todo lo que comes? Muchas veces hemos escuchado esta peculiar pregunta formulada a personas delgadas que por más que comen y comen no engordan, y mantienen su figura. Asimismo, muchas veces hemos escuchado decir ¿Por qué come tanto y no engorda? Mientras, uno come poco y no logra desaparecer esos rollitos demás. Para dar con la respuesta a estas miles de interrogantes, los investigadores de la Unidad de Investigación Clínica Bethesda, en Marylan, Estados Unidos, se dieron la tarea de averiguar por qué algunas personas mantienen un peso ideal a pesar de que comen en abundancia. ¿Alguna vez has cuestionado esto?

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El estudio encontró que la composición genética juega un papel importante en la obesidad, es decir, que se deja seducir por un entorno abundante lleno de alimentos grasosos pero apetitosos. Cada persona tiene una composición genética diferente que pueden afectar en lo que anhela y cómo su cuerpo usa la grasa para quemarlas. Por ende, en esta condición influyen dos factores entre los conocimientos que adquirimos sobre lo que es bueno para la salud y la capacidad de nuestro cuerpo para quemar más grasa mala. Es por ello que para llegar a esta conclusión se analizó a personas delgadas que consumen 4 mil calorías en un período de 24 horas, el doble de energía que necesita una persona sana normal. Se identificó que algunas personas son capaces de quemar más calorías mientras están comiendo, lo que influyen en que no acumulen tanta grasa.

¿Es la gran pregunta que nos hemos hecho siempre?

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En la investigación también se halló que la temperatura influye en el metabolismo. Ya que el frío ayuda a estimular la 'grasa parda', un tejido que consume energía para aumentar la temperatura corporal, para quemar más calorías. Esta grasa, que corre a lo largo de nuestro cuello, hombros y la columna vertebral en pequeñas cantidades, es como el tejido muscular, ya que quema calorías y ayuda a mantener estable la temperatura corporal interna.

Cabe mencionar que las personas delgadas tienen más grasa marrón que las personas obesas. Por tanto la temperatura puede influir en la grasa parda para que el cuerpo gaste más energía.