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Romántica historia de Ivan Rakitic y su esposa se viraliza, podría ser guion de una película

Si algún guionista está buscando una historia, podría contactar con el jugador del Barcelona, el éxito está asegurado.

Un verdadero amor a primera vista.

Un verdadero amor a primera vista.

El croata Ivan Rakitic, actual jugador del Barcelona de España ha compartido una romántica historia que tranquilamente podría ser el guion de una película de Hollywood como él mismo lo ha dicho. Todo ocurrió cuando el jugador llegó a España, antes que firmará su contrato con el Sevilla de ese país.

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"Tengo una historia para Hollywood. Es una comedia romántica. Pero es de verdad", arranca el relato que decidió titular "Un tío croata entra en un bar". Empieza.

"Mi hermano mayor viajaba conmigo, y cuando llegamos al hotel cenamos con gente del club. Por alguna razón, estaba con nervios después de cenar, y sabía que no podría dormir. Entonces, le dije a mi hermano: 'Tomamos una copa y después ya iremos a dormir'. Esas palabras cambiaron mi vida"

En aquella salida conoció a su esposa, una mesera que atendía en el bar que fue aquella noche junto a su hermano. Rakitic cuenta que apenas podía decir “hola” en español y que se enamoró de la joven ni bien la vio. “Me voy a casar con esa mujer”, le dijo Rakitic a su hermano.

Al día siguiente de ese mes de enero, firmó contrato con el Sevilla por cuatro temporadas y se quedó viviendo durante tres meses en el hotel donde trabajaba su futura esposa. "Cada mañana me acercaba al bar a tomar café o gaseosa para ver a la hermosa camarera. Solo sabía su nombre: Raquel. Ella no hablaba nada de inglés, y yo nada de español.

Ivan redactó cada palabra con tanto amor que en cuestión de minutos causó ternura y robó suspiros de muchos de sus seguidores. "No sé cómo explicarlo. A veces, conoces a alguien y te sientes distinto. Cada vez que la veía, explotaba una bomba dentro de mí. Tomé grandes y ridículas cantidades de café", rememoró con gracia aquellos primeros pasos.

Rakitic confesó que después de tres meses viviendo en un hotel, tuvo que mudarse a una casa, pero ese no fue impedimento para seguir visitando el bar para ver a Raquel.

"Si ella no estaba trabajando, me daba la vuelta enseguida para ir a otro sitio. Si estaba allí, pues eso me alegraba por completo el día", explicó lo que sucedía al mismo tiempo que mejoraba su español al escuchar radio y mirar televisión constantemente para aprender.

"Un día, finalmente, Raquel me explicó por qué no saldría conmigo. Me dijo: 'Eres un futbolista. Puedes moverte a cualquier país el año que viene. Lo siento, pero no'. Yo pensaba: '¡Tal vez piensa que no soy muy bueno y el Sevilla me vende el próximo verano!'. Una gran parte de mi motivación fue encajar con el equipo y conseguir que esa chica cenara conmigo", advirtió.

En total tardó 7 meses para convencerla y aceptara una salida. Dijo que todo el pueblo conocía su romántica historia. Una noche, alguien le avisó que Raquel estaba tomando algo en el bar con su hermana. "Fuimos directamente al hotel y me senté justo al lado de Raquel. Le dije: 'No estás trabajando. Al final tienes tiempo para cenar conmigo. Ella estaba sorprendida'".

A partir de ese momento no volvieron a separarse. Llevan seis años juntos y tienen dos hijas –Althea de cuatro años y Adara de uno–. Tiempo después conoció a la familia de su esposa, y la historia de amor tomó un tono aún más profundo.

Rakitic empezó a destacar en el Sevilla, muy motivado por el presente con su Raquel y en el 2014 el Barcelona se interesó en él. "Cuando el Barça me quiso fichar en 2014, fue una experiencia interesante porque la familia de mi mujer obviamente quería que me quedara. Fue una decisión bastante difícil para nosotros. Mi suegro me dijo: 'Vale, buena suerte, pero cuando juegues contra el Sevilla… Lo siento'. Es el sueño de cada chico jugar para el Barça".

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En la parte final del extenso texto, Rakitic cuenta una curiosa anécdota de su llegada al Barcelona. "Creo que cuando llegué aquí, algunos de los jugadores se sorprendieron por lo bien que hablaba castellano y eso me ayudó mucho para adaptarme a la cultura del vestuario. Eso se lo debo y agradezco a mi esposa”.