¿Por qué en ocasiones sentimos que nuestra mente se queda en blanco?

¿Te ha pasado que estás hablando de algo muy bien y de pronto te distraes  y te olvidas de todo lo que hablabas y tu mente queda en blanco o vacía? A veces también lo conocemos como ‘bloquearse’, “Ay, perdona, me bloquee, ¿qué decías?”.

Según el doctor Manuel Díaz-Rubio, presidente de honor de la Real Academia de Medicina “Quedarse en blanco es algo que le puede suceder a cualquiera y debe considerarse normal, salvo que se produzca con una gran frecuencia”, y así lo explica en su recién publicado libro “Los síntomas que todos padecemos”.

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Esta sensación de ‘bloqueo’ suele ocurrir en momentos de gran tensión emocional, o de mucho estrés. De repente estás lleno de responsabilidades o de trabajos y te bloqueas. También suele presentarse en momentos inquietantes como una exposición, una conferencia, una entrevista, y situaciones similares.

¿Te imaginas que te suceda en plena entrevista de trabajo, o peor aún en plena sustentación de tu tesis? ¡Para morirse!

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¿QUÉ HACER EN ESTAS SITUACIONES?

Algo muy importante y que te resultaría muy útil es tomarlo más a la ligera, es decir restarle importancia. “Las personas con experiencia saben cómo salir del paso, bien a través de escapes disertatorios o bien distrayendo la atención del público con alguna anécdota o cualquier forma de evitar que los presentes se den cuenta de ello”, así lo explica el doctor Diaz-Rubio en su libro.

Hay una hormona responsable de estas situaciones, se llama corticosterona, y se libera en momentos de tensión, ansiedad o miedo, afectando así a al hipocampo (la parte del cerebro fundamental para recordar), la amígdala (responsable de las emociones) y la corteza superior (relacionada a la recuperación de los recuerdos).

Si sufres constantemente de estos bloqueos te recomendamos aprender técnicas de relajación que te permitan sentirte más tranquilo, otra solución puede ser dedicarte a hacer ejercicio.